Dossier prensa Zalamea de la Serena

Castillo de Arribalavilla Zalamea de la Serena

El Ayuntamiento de Zalamea de la Serena presenta en FITUR, en el pabellón de Turismo de Extremadura (Pabellón 7), el proyecto ” Zalamea vista desde la historia”, una propuesta para dar a conocer el potencial de Zalamea como destino turístico alternativo, basándose en su patrimonio artístico y cultural, que la hacen merecedora de ser un destino para el visitante que busca experiencias culturales e históricas.

Zalamea, alfa y omega de la historia, caminando hacia el turismo.

En la actualidad, después de los duros momentos vividos en época de pandemia, el turismo está experimentando un auge a nivel mundial y ya no solo se buscan lugares exóticos y lejanos, aparece un tipo de turismo ávido de experiencias, de cultura, un turismo en el que los lugares cercanos son objetivos por descubrir, el turista actual busca descubrir la historia, sumergirse en ella, disfrutar del patrimonio , tocar, pisar, sentir… y Zalamea puede ofrecer un amplio catálogo de posibilidades .

Con un extenso Patrimonio Cultural , nuestra localidad puede ofrecer un viaje sensorial a diferentes épocas a través de sus monumentos, Zalamea como destino arqueológico nos lleva desde los tartesios, con Cancho Roano como máximo exponente de la época´, un yacimiento abierto al visitante con un Centro de Interpretación que le descubre al turista la evolución del mismo , hasta el Siglo de Oro, pasando por la época romana, de la que el Distylo, único en la península, da fe en la Plaza de la Constitución, a la sombra de la Iglesia de Nuestra Señora de los Milagros, testigo del pasado glorioso de Zalamea , de aquella Zalamea que fue priorato y de esa época también encontramos vestigios paseando por sus calles.

Aquel pasado se nos muestra también en la Real Capilla del Cristo de la Quinta Angustia, un monumento con unas características especiales entre las que destaca su azulejería , un centro de peregrinación en el pasado y en la actualidad.

En cuanto al patrimonio intangible, el turista puede respirar la esencia del Siglo de Oro, desde Nebrija, que en Zalamea, bajo el mecenazgo de Juan de Zúñiga, sentó las bases de nuestra lengua escribiendo la primera Gramática, hasta Calderón , que inmortalizó a Zalamea en su obra El Alcalde de Zalamea, cuya representación por parte de los vecinos se lleva a cabo todos los años en el mes de agosto y ostenta el título de Fiesta de Interés Turístico Nacional .
El visitante disfrutará del carácter de su gente, ese carácter heredado de antepasados intelectuales, aventureros, intrépidos ,de mujeres empoderadas…. Ese carácter heredado de Diego de Arce y Reinoso ,de Juan Tamayo de Salazar, de Rodrigo de León Salazar, de Baltasara Petronila de Arce y Suárez, mujer filósofa del siglo XVI o Marina Ortiz de Gaete, para la que su condición femenina no fue impedimento en la época para viajar hasta el nuevo mundo y forjar allí su futuro.

Desde el Ayuntamiento de Zalamea se le quiere mostrar al turista el castillo de Arribalavilla como visor del tempo, como el balcón desde el que mirar a esa historia que se respira en la localidad.

Un castillo del que debemos buscar sus orígenes, según nos desvelan las excavaciones llevadas a cabo , en un primer asentamiento coetáneo a Cancho Roano y por ende vinculado a la época de Tartessos y sobre el cual, más tarde, se asentaría la población romana Iulipa, el castillo se ubicaría, probablemente , sobre el foro de la ciudad romana. Este pasado se nos revela con el descubrimiento de un tramo de muro fortificado y unas dependencias aún no definidas.
Su emplazamiento idóneo y estratégico, sobre una loma con amplitud de visión sobre el territorio circundante, es lo que hace que se convierta en el lugar idóneo para levantar una fortaleza . Las crónicas de la Orden de Alcántara atestiguan la existencia de un hins o lugar fortificado sobre el que levantarían la fortaleza cristiana en el siglo XIII después de la reconquista.

A finales del siglo XV , principios del XVI el castillo es transformado, cambiando su fisonomía interior y exterior, este cambio es muy notable en sus torres. Pierde su arcaico carácter defensivo para acoger una residencia palaciega renacentista regida por D. Juan de Zúñiga, último maestre de la Orden de Alcántara, que administrará desde Zalamea y Villanueva el partido de La Serena, territorio que obtuvo a cambio de la cesión del maestrazgo a la corona y son los mismos Reyes Católicos los que visitarán su residencia en el castillo de Zalamea en la Pascua de 1502.

D, Juan de Zúñiga trae consigo una corte de eruditos que conformarían la conocida como primera Academia Humanista y en la que destacó, sin duda alguna, la figura de Antonio de Nebrija, que aquí ,entre los muros del castillo, esos muros que aún se alzan desafiando al tiempo, sienta las bases de nuestro idioma, es en Zalamea donde escribe la primera Gramática de la lengua castellana y el primer Diccionario .

Entre los siglos XVI y XVIII, el edificio tiene múltiples usos, si bien va deteriorándose con el paso del tiempo. Se usan sus muros para anexar casas y parte del mismo pasa a formar parte de estas dependencias que crecen en torno a él. En el siglo XIX, tras desamortizaciones, el complejo arquitectónico es enajenado, pierde parte de sus dependencias palaciegas exteriores y se utiliza como cementerio hasta la década de los ochenta del siglo XX. A partir de entonces empieza una recuperación del edificio y una puesta en valor, se llevan a cabo limpiezas, estudios, excavaciones, se reconstruyen algunos de sus elementos y se dota de escaleras que hacen posible el acceso al paso de ronda, asegurado con una valla, que permite al visitante pasear por el mismo y disfrutar de unas magníficas vistas sobre nuestra comarca. El espacio interior del castillo es utilizado como espacio cultural y en él se llevan a cabo escenificaciones, conciertos… Se ha creado un espacio vivo en un entorno único.

En la actualidad, el Ayuntamiento de Zalamea está llevando a cabo un arduo trabajo de recuperación, limpiando y facilitando el acceso a sus torres ,dotando al edificio de escaleras y elementos de seguridad que hagan posible el acceso a las mismas sin riesgo para el visitante. Por otro lado, la zona circundante ha sido declarada “Manzana afectada por protección de muralla”, para liberar los lienzos del castillo de viviendas anexas, algunas de estas viviendas han sido adquiridas por el Ayuntamiento y otras cedidas por los propietarios. Está prevista la dotación de infraestructuras que faciliten la accesibilidad, señalización, nuevo alumbrado, dispositivos de audioguía…

Todas estas actuaciones harán que el Castillo de Arribalavilla recupere el valor que merece un lugar que simboliza la historia de Zalamea, un vigía de la historia que invita al visitante a conocernos, porque en Zalamea no contamos historias, en Zalamea la historia se vive.